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jueves, 11 de septiembre de 2014

Matrimonio

Existen algunas reglas acerca del matrimonio y del amor que parecen ser ciertas:

a) si no se respeta a la otra persona, habrá problemas.
b) si no se sabe transigir, habrá problemas.
c) si no se sabe hablar abiertamente de lo que pasa entre la pareja, habrá problemas.

Si no se tiene un catálogo común de valores en la vida, habrá problemas; los valores deben ser, como mínimo, semejantes.

El matrimonio es "como una tarea" muy importante y si no se prueba, uno se pierde una barbaridad de cosas.

A veces, mi generación me da lástima, en nuestra cultura es muy importante encontrar una relación de pareja y de amor con otra persona porque, básicamente, una buena parte de la cultura no nos lo aporta; pero, los pobres chic@s de mi generación somos demasiado egoistas para participar en una buena relación de amor o bien, nos lanzamos al matrimonio apresuradamente, con el resultado final de divorcio porque no sabemos lo que queremos de nuestro compañer@ y/o no sabemos quiénes somos.

Tener una persona amada es muy importante, te das cuenta cuando estás pasando una mala época, cuando no estás muy bien.

Como dijo Morrie Schwartz "los amigos son estupendos, si los tienes, pero los que se definen como tus amigos no van a estar por la noche contigo cuando estés tosiendo y no puedes dormir, alguien se pasa la noche en vela a tu lado, intentando serte útil y puedo afirmar que no sólo es tu amigo". Morrie Schwartz tenía la enfermedad de ELA cuando hizo esta reflexión.

El matrimonio funciona como un equipo donde descubres quién eres, quién es la otra persona y de qué manera te adaptas o no te adaptas. No es tarea sencilla.

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